Los disolventes son líquidos que se utilizan para disolver, extraer o suspender otro tipo de sustancias y así formar una disolución. Los disolventes son ampliamente utilizados en distintos sectores de la industria como (farmacéutica, sector de pinturas y barnices, industria petroquímica…).
Los disolventes están catalogados como residuos peligrosos y Agaleus cuenta con la única planta de tratamiento de este tipo de residuos industriales de Euskadi donde cada año tratamos 80.000 toneladas de residuos.
Existen distintos tipos de disolventes que se categorizan de la siguiente forma:
- Disolventes halogenados
- Disolventes no-halogenados: subgrupos como alcoholes, cetonas, acetatos, hidrocarburos aromáticos…
El tratamiento que se aplica en Agaleus para los distintos residuos de disolventes persiguen su valorización y regeneración para volver a introducirlos en la cadena de valor. El proceso consta de las siguientes etapas:
- Los disolventes llegan a nuestra planta en camiones cisterna o en GRG’s
- Se toma una muestra y se analiza para comprobar la composición y las características de cada tipo de disolvente recepcionado.
- Después, los destilamos. Para ello, calentamos y aplicamos vacío al disolvente hasta que alcance el punto de evaporación. De esta forma, obtenemos un vapor de disolventes.
- En la etapa de condensación, los vapores pasan por unos intercambiadores que enfrían la mezcla de disolvente. Una gran parte del vapor (aprox. un 95%) se convierte en líquido, que podemos valorizar, y otra permanece en estado de vapor.
- El vapor residual, obtenido tras el paso por un condensador de seguridad que capta los disolventes menos volátiles, atraviesa un depósito de carbón activo, que retiene la mayor parte de los compuestos orgánicos volátiles restantes. Mediante un sistema de medición en continuo nos aseguramos de que las emisiones a la atmósfera cumplan los límites ambientales exigidos.
- El líquido o producto recuperado, se somete a un proceso de decantación que permite la separación de las fases acuosas en el caso que existieran.
Se almacena y queda preparado para devolver al cliente o para su venta a un tercero, cerrando así el círculo de la economía.
- La fracción de deshecho de este proceso de destilación se manda a gestor autorizado.
Gracias al trabajo de Agaleus podemos evitar que los residuos de disolventes acaben depositados en vertederos, y les damos una nueva vida para que puedan volver a utilizarse. De esta manera, apoyamos a la industria de Euskadi, ayudando a mejorar su circularidad y desempeño ambiental.